Fue mandada construir por Francisco de Erado, secretario personal del Rey Felipe II, con objeto de que la nobleza encontrara alojamiento cómodo y no tuviera un hospedarse en humildes casas a lo largo del camino. Su construcción se inició en 1565 y terminó en 1571, incluyendo una ermita dedicada a Ntra. Sra. de los Remedios de la que aun puede reconocerse la cimentación. Existe una leyenda sobre sus ruinas que las atribuye al Convento de Casarás, un antigua convento de templario, mitad fortaleza, mitad monasterio habitado por el fantasma de un caballero templario, que a lomos de su caballo, recorre la Sierra de Guadarrama. (Foto: Autor / Fototeca CENEAM)